Pachucos y Cholos, la subcultura entre dos naciones

Peregrineros

México es un país rico en cultura y tradiciones precolombinas heredadas de los pueblos originarios, y de las cuales se hacen alarde en los destinos turísticos de la nación, pero a principios del siglo XX se desarrollaron algunas subculturas que adoptaron las costumbres occidentales combinadas con las locales, creando una identidad única y en algunos casos marginadas por la sociedad mayoritaria.

Los Pachucos

Este es el caso de los pachucos, una subcultura que comenzó con un grupo específico de jóvenes a finales de la década de 1920, en la frontera mexicana con estados unidos, principal e inicialmente en Ciudad Juárez, Chihuahua, donde los jóvenes vestidos de traje holgado, sombrero de ala ancha generalmente con una pluma, pantalones bombachos ajustados al tobillo y con un argot singular que los identificaba fácilmente, cruzaban regularmente a El Paso Texas donde se comenzó un intercambio cultural e histórico constante.

Inicio del Movimiento

Les gustaba la música boggie, swing y el mambo, además de presumir vehículos veloces o con algunas modificaciones mecánicas de la época, cabe mencionar que el pachuco tenía la principal característica de hablar en “espanglish” una combinación de español e inglés, agregando palabras que ellos mismos inventaban dándole doble sentido o significado.

Con el paso de los años se fue extendiendo el movimiento y para finales de la década de 1930, el pachuquismo había llegado a todas las ciudades fronterizas del país, incluso ya estaban instalados en algunas ciudades norteamericanas, principalmente en el estado de California, donde a la par surgía otro movimiento de identidad de los llamados Chicanos, este pertenecía a los mexicoamericanos que eran hijos de mexicanos que habían migrado a los estados unidos y tuvieron familia en el país vecino, o bien los mexicanos que llegaron desde una edad muy temprana y no se identificaban así mismos como mexicanos ni como estadounidenses, ya que tenían la influencia de ambos países y les era difícil ubicarse de un lado o del otro, de ahí vino el dicho que no eran “ni de aquí, ni de allá”, a diferencia de los pachucos, los chicanos por lo regular eran la clase trabajadora, principalmente dedicados a la agricultura o a trabajos de construcción, vestían normal y deseaban sobresalir con esfuerzo, incluso impulsaron su participación política.

Tin Tan, el icono del cine mexicano

Para la década de 1940 los pachucos ya eran reconocidos en gran parte de México, principalmente por las interpretaciones de Germán Valdez Tin Tan, que se caracterizaba en sus películas como un pachuco que vivió algunos años en la frontera, mostrando al mundo como el argot y modismos de la subcultura fronteriza, se volvió un representante de este segmento que buscaba una identidad propia y gracias a este actor lo lograron, cabe mencionar que la película que mejor plasmó el modismo del pachuco fue la de “El rey del barrio” exhibida en 1949, y donde se ganó el apodo del pachuco de oro, Tin Tan aprendió los modismos del pachuco durante su juventud cuando por el trabajo de su padre en la aduana, se tuvo que mudar a Ciudad Juárez, y donde trabajó en la estación de radio XEJ.

Fusión

El auge del pachuco disminuyó en la década de 1960 y para 1970 el movimiento mutó a una fusión entre chicanos jóvenes y los nuevos pachucos de estados unidos, las cuadrillas de pachucos se volvieron más violentas y se convirtieron en pandillas que ya no buscaban solamente pasarla bien, sino buscaban el control de determinado territorio, principalmente los barrios marginados de Los Ángeles, California y otras ciudades fronterizas entre ambas naciones, a esta fusión se les bautizó como “Cholos” y aunque hay muchas teorías del origen del nombre, la más aceptada es el de la abreviatura de “Chicanos Locos” haciendo referencia a las pandillas de jóvenes chicanos que estaban involucrados en actividades criminales.

Los Cholos

Los cholos muy pronto se hicieron notar en varias partes de México, para la década de los 90s ya había imitadores en gran parte del territorio mexicano, incluso emergieron nuevas pandillas con los códigos originales de las que se formaron inicialmente en Estados Unidos, en muchas ocasiones fueron fundadas por Cholos que deportaron del país vecino y decidieron emigrar al sur.

Las pandillas tomaron su rumbo criminal, mientras que por otra parte, y sin darse cuenta se creó la subcultura con el mismo nombre, pero esta vez con una vestimenta más alusiva al jornalero que trabaja en Estados Unidos, con camisas de franela, paliacates amarrador en la frente, y pantalones holgados, después de unos años también comenzaron a raparse en alusión a los constantes ingresos a prisión, pero esto más allá de las actividades criminales se volvió un estilo de vida para muchos chicanos, incluso si no estaban involucrados con las pandillas, hasta el día de hoy existe una importante cantidad de “Cholos” que viven en gran parte de Estados Unidos y ciudades fronterizas del norte de México.

Con información de Reporte Juárez/ Fotos Redes

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